Primero les contaré las últimas novedades. Hace una semana y media que terminé la carrera, pero no por ello he estado más libre. Trámites y detalles finales para el acto académico aún estaban a la orden del día, eso sin contar que este fin de semana tuve mi primera presentación con el grupo Darkness Eyes, por lo que tuve más ensayos de los usuales y por obvias razones, el fin de semana entero estuve ocupado.

Por ahora estoy en mi corta semana de vacaciones laborales, y aunque quisiera tirarme todo el día a ver series, jugar videojuegos y leer (comics, mangas, novelas y blogs), tengo varios pendientes personales que atender y entre ellos, me siento obligado a mantener este sitio actualizado, así que ahí le vas un pequeño post por mientras.

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A lo largo de la existencia de este espacio, ha habido temas muy diversos sobre los que he publicado; opiniones personales, escritos, dibujos, experiencias, etc. Sin embargo, hoy me gustaría hablar sobre el mismo blog o más bien, de una parte importante de él: los comentarios.

Dicen en el mundo del espectáculo que los aplausos son los que dan vida a los artistas, sean actores, bailarines, cantantes, literarios o lo que sean. Que cuando no los reciben, se sienten vacíos o que están haciendo un mal trabajo; lo mismo pasa con los comentarios en el blog.

Un bloguero se esfuerza (o al menos eso espero) por transmitir sus ideas, pensamientos o incluso el día a día de su vivir a través de las palabras escritas o habladas (con eso de los video bloggers), que lo menos que podríamos esperar es un poco de retroalimentación. Es cierto, por lo menos en mi caso (y creo que el de muchos) lo hacemos meramente por diversión y como forma de expresión, no precisamente por los comentarios, sin embargo, siempre es muy grato recibirlos, sea para criticar, para demostrar su punto de vista ante el tema, para concordar, felicitar, sugerir o corregir. Y no solo es grato, también nos orienta a mejorar. Cada que alguien da su punto de vista, aprendes como es que otras personas piensan diferente o similar a ti. Si alguien te hace alguna observación o corrección, eso mejora tu texto, forma de escribir y a ser más detallista y cuidadoso. Si alguien te felicita, te alienta a seguir plasmando tus ideas. En general, los comentarios son un punto de referencia para el bloguero para ser mejor.

Ahora que no solo pasa en los blogs. El dar tus comentarios a las tiendas o restaurantes que visitas, ayudas que estos mejoren (si es que les interesa mejorar, claro), pues la opinión del público es la que dictaminará en que fallan o que están haciendo bien. Y no es todo, también es un excelente método de obtener beneficios. Muchas tiendas te dan descuentos o pequeños regalos por dar tu comentarios; otras te premian si es que no quedaste satisfecho por el servicio con tal de no perder a un cliente (y mínimo a otros siete más por sus malas recomendaciones). Obvio los invito a quejarse con fundamentos, no vayan por la vida quejándose de todo nomás por que sí, pero háganlo una práctica cotidiana; ganan los blogueros, ganan las empresas y sobre todo, ganan ustedes pues con esos comentarios obtendrán mejor servicio, mejores productos y mejores post.

Pero bueno, estoy tan dispuesto a demostrarles que dando comentarios todos ganamos que en esta ocasión les tengo un regalo especial. A los primeros cinco comentarios que hagan en este post dando su opinión sobre el tema (y que vivan dentro del área metropolitana de Guadalajara), les regalaré un encendedor del blog (hechos por mí :D) como se muestra en la imagen y los cual estaré entregando personalmente.

Esperando y motivando a que de ahora en adelante haya más comentarios…

R01 out…